Te ofrecemos como parte importante de la prevención y el mantenimiento de tu salud, un examen completo de tu boca, con el que podremos identificar a tiempo la presencia de alguna patología que requiera tratamiento, con el fin de evitar el deterioro de tu salud bucal y de tu bienestar en general.

Es lo que popularmente conocemos como “matar el nervio”; en realidad lo que hacemos es retirar el tejido del diente que un día estuvo vivo, y que por alguna afectación tipo caries, golpes, bruxismo, etc., ha perdido su vitalidad, generando una sintomatología de enfermedad y, por lo tanto, que requiere ser tratada.

Te explicaremos las diferentes maneras que hoy día existen para reponer uno o más dientes y te aconsejaremos lo que mejor se acomode a tus circunstancias y necesidades: desde prótesis removibles o fijas a, por supuesto, rehabilitación implantológica (implante dental).

Es la manera más conservadora de mejorar toda tu boca y sus diferentes aspectos. Tener los dientes alineados y una buena mordida te permite masticar mejor y facilitar la limpieza, evitando así que se estropeen tanto los dientes como las encías, que también se desgastan menos si cuidamos adecuadamente de tu dentadura. Y, por supuesto, podrás disfrutar de una bonita y armoniosa sonrisa.

Es una excelente manera de prevenir daños potenciales. Consiste en mejorar las condiciones para que el cambio que experimentamos con el crecimiento y desarrollo de la boca sea lo mejor posible. Recambio dental: de la dentición de leche a la dentición definitiva.

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